es Perfecta, es Correcta, está Bien.
Detrás de ella hay una lección,
un aprendizaje a descubrir.
Una superación viene con ella,
una toma de conciencia.
Realmente no hay nada que temer,
la vida es un fluir constante de
experiencias, de momentos,
de instantes.
Si no lo etiqueto, si no lo califico
y tan solo lo vivo, es más fácil.
Soltando el juicio, la crítica,
la expectativa, la exigencia.
Aceptando lo que es, lo que hay,
lo que surge, el Sentimiento.
Reconociendo lo que fue,
fue verdad.
Abrazando y hablando con esa
parte que padeció, que sufrió,
que tembló.
Dejando marchar el recuerdo
de lo que fue, lo que ya no es,
de lo que pasó.
Con sentimiento de gratitud
desde el corazón, dejando ir,
dejándolo atrás.
Siento el Presente.
Respiro, inhalo, exhalo.
Sonrío.
El corazón se expande,
los ojos brillan.
Presente, en calma, sonrisas.
Le doy espacio en mi interior,
al Silencio.
Escucho a la Vida,
experiencias que llegan,
a través del encuentro,
para conocerme.
Aprendizaje permanente,
para toda la vida.
Alumna constante.
La Vida Amiga.
Y sonríe.
